La declaración de una testigo protegida en el marco de la causa contra el clan Ale por el lavado de activos y asociación ilícita, produjo un revuelo al asegurar que vio a María de los Ángeles “Marita” Verón, en la casa de una señora llamada Lita, en la que se le practicó un aborto a la joven en julio de 2002. La testigo aseguró que en esa casa se le practicaban abortos a las mujeres formaban parte de la red de trata de personas que manejaban los Ale. “Lo novedoso es que esta mujer dijo que vio a Marita en esa casa en la que se practicaban abortos. Ella –la testigo-, luego se arrepintió de no haber hecho nada para ayudar a Marita”, contó Garmendia sobre el testimonio de la mujer, quien aquella vez se practicó un aborto de embarazo producto de una relación que mantuvo con Ángel Ale, de acuerdo a lo que contó.