Mario Wainfeld dialogó con la directora General de Cultura y Educación bonaerense, Agustina Vila, acerca de la viabilidad de la vuelta a las clases presenciales y el cuidado de la salud de la población.
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En ese sentido, Vila explicó que el país cuenta con un sistema educativo heterogéneo y detalló los acuerdos alcanzados por el Consejo Federal de Educación en relación a la elaboración y análisis de un conjunto de indicadores epidemiológicos sobre el nivel de riesgo de cada distrito, provincia y localidad del país.
Asimismo, sostuvo que dicho análisis arrojará qué tipo de actividades podrán llevarse adelante en la búsqueda de revincular a estudiantes, un marco de certidumbre para la actividad educativa, que no es una más, ya que involucra a trabajadores, docentes, estudiantes y la reorganización de los ámbitos familiares.
En tanto explicó que aquellos distritos que tengan un "riesgo bajo" podrán empezar a transitar la vuelta a la presencialidad, con la aplicación de un conjunto de protocolos y ciertos criterios, como la evaluación espacios, la distancia entre pupitres, y la provisión de elementos de higiene, para una vuelta progresiva.
Además informó que este plan no regirá para todos los estudiantes en la primera etapa, sino que alcanzará a los mas afectados, siendo estudiantes desvinculados o sin devolución de las tareas asignadas por las instituciones; y contó que se realizará una capacitación para su aplicación.
En otro orden, Vila se refirió a la situación que atraviesa la provincia de Buenos Aires y sostuvo que delos 135 distritos bonaerenses, solo 24 cuentan hoy con un riesgo bajo por lo que la vuelta alas presenciales se dará en 720 escuelas con 12000 estudiantes (un 8% del total de esos distritos) en grupos de no mas de 10.
En tanto señaló que la provincia evaluará esas experiencias con un monitoreo permanente para garantizar la seguridad sanitaria.
Además, Vila se refirió al programa de Acompañamiento a las Trayectorias y la Revinculación (ATR), que cuenta con visitas domiciliarias personalizadas por parte de docentes suplentes o en ultimo año de formación, a grupos reducidos de no más de 6 estudiantes.
En ese sentido explicó que muchas veces, los estudiantes no solo tienen problemas de conectividad, sino también vulnerabilidades económicas, de derechos, socioafectivas y habitacionales.
Por último señaló la aplicación de los programa, Escuelas a la Obra, aplicado durante toda la pandemia por la gobernación para garantizar la seguridad edilicia de los establecimientos (unas 1200 obras) y su reequipamiento; y el de Escuelas Limpias, para el abastecimiento de productos de limpieza.