La infectóloga Charlotte Rus, integrante del Comité de Crisis que asesora al Presidente Alberto Fernández en diálogo con LV4 evaluó las decisiones tomadas por la provincia de Mendoza, a partir de la flexibilización del aislamiento social, que permite la reapertura comercial.

“Es muy bueno que esto pase en una región que casi no ha tenido casos- evaluó-. Tendrán que hacer lo posible para que la experiencia sea positiva. Van a estar mirándolos de todo el país, justamente porque es una experiencia piloto. No ha sido así arbitrariamente. En el caso de la provincia de ustedes es en toda la provincia y lo más importante es que tenemos que recordar, es mantener el distanciamiento social, no establecer contacto con el otro, usar el barbijo, lavarse las manos. Son recomendaciones a tener muy en cuenta, y si la experiencia es positiva va a servir de ejemplo para otros lugares, que tal vez estén temerosos. Van a ser muy observados y si se portan bien, seguramente eso nos va a ayudar a todos”.

La profesional habló también de quienes descreen de la gravedad del virus. “Les diría que miren a los países que pensaron así y cómo les fue. Es bastante difícil entender cómo un virus puede producir semejante catástrofe, pero la realidad es que si no se mantienen las normas de cuarentena y no se hubieran instrumentado en el momento que se decidieron, probablemente tendríamos muchísimos más casos y más muertes. No es un manejo político, sino médico- sanitario y si lo mantenemos podremos cumplir con el objetivo de ser un país relativamente controlable, con un número de casos aceptable y no como otros países, donde la situación se ha disparado terriblemente”.

Rus estimó que la clave serán los grandes centros urbanos, donde es más difícil mantener el distanciamiento social. “Debe existir allí un nivel de educación y conciencia importante, para que la gente mantenga el  distanciamiento, que es el único factor que realmente previene, la clave de esto, que es fácil de decir y difícil de cumplir, y en los centros urbanos, esto no es tan posible”.

Rus señaló que uno de los grandes problemas es el trasporte público. Si pudiera lograrse que la gente no se desplazase y se mantuviera dentro de su domicilio o peridomiclio y no desplazarse, sería todo más fácil.

Recalcó la importancia de lavarse las manos, no tocarse la cara, porque el virus ingresa justamente por las mucosas.

Finalmente mencionó que la mortalidad sigue estando muy vinculada a la edad y a los factores de riesgo, los muertos menores de 60 siguen siendo los menos.