Una trabajadora de la empresa Securitas se encadenó en las puertas de la empresa BGH de la ciudad de Río Grande, por haber sido despedida sin justa causa. “Soy única sostén de familia con hijos a cargo”, dijo Sandra Benítez.
“El viernes, antes de que finalice mi jornada de trabajo, el supervisor me notifica verbalmente de que estaba despedida, y que pase por la oficina a notificarme hasta que me llegue el telegrama, y hasta el día de hoy el telegrama no llegó”.
Finalmente, Sandra Benítez insistió que, “tengo que trabajar, soy única sostén de familia, tengo hijos menores a cargo, una hija embarazada también a mi cargo, y vivo en la margen sur de manera precaria y necesito construir mi casa”.