Funcionarios del Ministerio de Ambiente del Gobierno del Chubut recorrieron instalaciones petroleras afectadas por derrames de hidrocarburos. Representantes de la empresa CAPSA explicaron el procedimiento de remediación al que se sometió a los terrenos afectados, uno de ellos en Caleta Córdova y el restante en zona de chacras de Kilómetro 17.
Tras los derrames ocurridos en la zona norte de la ciudad, funcionarios del Ministerio de Ambiente de la Provincia encabezaron recorridas en la zona para evidenciar las tareas de remediación que se están llevando adelante.
En este sentido el ministro de Ambiente, Ignacio Agulleiro, explicó respecto al incidente registrado en ductos que derivaron en la llegada de petróleo a las costas de éste barrio, situado en la zona norte de la ciudad que “en el primero de los casos recorrimos ocho kilómetros a través de un cañadón hasta llegar al caño roto” y detalló “el objetivo era ver la eficiencia de las tareas de remediación, qué tipo de acciones faltan y ver si existe evidencia de otros orígenes del hidrocarburo como por ejemplo, pasivos ambientales preexistentes”.
Asimismo, el funcionario expuso que se identificaron algunos pasivos que podrían haber aportado algo de petróleo. Si bien estaban completamente enterrados, luego de la tormenta volvieron a estar visibles y el fluído puede haber sido transportado por el agua.
En éste caso destacó que las tareas de limpieza y saneamiento se realizan de acuerdo a lo previsto contándose con la utilización de cuadrillas especiales dispuestas por la operadora y que los trabajos específicos podrían demandar algunos días más.
En cuanto a la situación detectada en Kilómetro 17, CAPSA intervino mediante un acuerdo firmado con los productores afectados por el derrame ocurrido también durante el temporal y pudo corroborarse que las tareas de contingencia funcionan eficientemente.
“Se está haciendo el saneamiento de márgenes y retirando con camiones chupa los últimos restos. Además la empresa está prolongando el canal por donde corrió el hidrocarburo para evitar que el agua, en caso de otra lluvia, vuelva a aflorar. El objetivo es canalizarla hasta un bajo para que pueda evaporarse y no afecte a las chacras”, describió Agulleiro. “En síntesis seguimos controlando que las empresas lleven adelante las tareas de remediación correspondiente de manera eficiente y rápida. Todavía falta terminar el procedimiento pero las empresas han demostrado interés en resolver cada situación” concluyó el ministro.