Con la llegada de las bajas temperaturas y los primeros días fríos, también comienzan a crecer los casos de intoxicación por monóxido de carbono, una problemática que genera más de 200 muertes cada año en Argentina. El monóxido de carbono es un gas inodoro, incoloro, inflamable y altamente tóxico, que se produce cuando se queman materiales combustibles como gas, gasolina, kerosene, carbón, petróleo, o madera. En invierno, son usuales los accidentes cuando no hay correctas instalaciones de calefacción y se encienden estufas u hornallas de la cocina o braseros y salamandras en ambientes cerrados. Carlos Nosalevich, jefe del cuerpo de Bomberos de Concepción del Uruguay señaló "Todos los métodos de calefacción tienen sus riesgos si no tomamos medidas de prevención. El monóxido de carbono produce muertes todos los años en Argentina". "Hay diferentes recomendaciones, quien tiene calefacción con gas natural es necesario dejar una ventana con una mirilla abierta para que se renueve el oxígeno y no tapar extractores. Quienes calefacciones con energía eléctrica cuidar los enchufes, estar atentos. Finalmente quienes se calefaccionan con braseros, no dejarlos encendidos fuera del hogar y apagarlos afuera" expresó.
ANTE LA OLA POLAR