Científicos del Conicet y de la Universidad Nacional del Litoral registraron una media de 96 botellas por km sobre su margen: una de las mayores concentraciones en aguas continentales del mundo.
También recolectaron y cuantificaron una gran cantidad de envoltorios de alimentos, bolsas de polietileno y empaques de electrodomésticos.
Por Nacional, el doctor Martín Blettler, del Laboratorio de Hidro-Ecología del Instituto Nacional de Limnología, explicó que “todos estos residuos son de origen doméstico y de uso cotidianos" y agregó que ponen en peligro el ecosistema en la laguna Setúbal y, por consiguiente, el del río Paraná".