La médica infectóloga Leda Guzzi explicó porque algunas enfermedades prexistentes no transmisibles inciden como factores agravantes del COVID-19.
Guzzi afirmó que, de acuerdo a las estadísticas globales, la edad es por lejos el factor que más se relaciona con la gravedad de los cuadros y la mortalidad. Pero también algunos problemas de base como la diabetes, las enfermedades cardiovasculares o la obesidad, que agudizan los trastornos provocados por el coronavirus.
Según la científica, mientras la diabetes suele debilitar la inmunidad celular, que tiene un rol fundamental en la detección y la neutralización de los virus; las afecciones cardiovasculares provocan déficits prexistentes de oxigeno y nutrientes y limitan la capacidad metabólica necesaria para combatir la infección provocada por el SARS-COV-2.
En sentido, Guzzi remarcó la importancia de cumplir con chequeos períodicos para controlar este tipo de afecciones y advirtió que en la actualidad, muchos pacientes están "resintiendo sus controles", por temor a la epidemia o debido a dificultades de acceso o movilidad provocadas por las medidas de aislamiento.