Durante el espacio de salud del programa Muchas Gracias, dialogamos con Victoria Tiscornia, investigadora de la Fundación Interamericana del Corazón habló sobre el proyecto de “Promoción de la alimentación saludable”, más conocido como etiquetado frontal.

Tiscornia aseguró: “vemos con mucha preocupación lo de ayer porque se perdió una oportunidad única a una ley que garantiza nuestro derecho a la información de lo que estamos comiendo”.

Según explicó Tiscornia, se trata de “una ley integral porque además de contemplar el etiquetado frontal, aquellos productos que tengan al menos una de las etiquetas no se podrán vender en las escuelas y no se recomendarán para el consumo de niños niñas y adolescentes”.

Por otra parte, y en respuesta a las críticas de algunos sectores, Victoria aclaró que “el etiquetado no demoniza los alimentos, sino que nos da la información de lo que estamos comiendo, con el fin de tomar decisiones informadas”.

Respecto de la información que hoy está presente en los paquetes, la especialista afirmó que “no solo la información no es clara, sino que es incompleta e insuficiente por lo que es necesaria la ley para que cualquier persona pueda acceder a esa información. Solo el 13% de la población comprende la información actual en los productos”.

Por otra parte, expresó que ya ha quedado demostrado en otros países el éxito de la estrategia del etiquetado frontal: “ esta ley es un cambio de paradigma, viene a informarnos que estamos comiendo comida chatarra. Viene a desenmascarar lo que comemos. A modo de ejemplo, Chile disminuyó en un 25% el consumo de bebidas azucaradas. Eso llevó a que la industria reformule sus productos para que tengan menos nutrientes críticos”.