Ante la intención anunciada del gobierno de Córdoba de reforestar las zonas afectadas por los incendios a través del método conocido como "bomba de semillas", el doctor en Ciencias Biológicas e investigador del Conicet, señaló que "lo mejor es trabajar con plantines, no con semillas". "Tampoco trabajar al voleo, sino plantar en los lugares donde el fuego realmente arrasó todo", explicó Argañaraz, quien remarcó que "la prioridad es sembrar herbáceas, que van a contener el suelo ante las lluvias. Para el resto hay que esperar al rebrote del bosque".

Paralelamente, el especialista del Instituto de Altos Estudios Espaciales Mario Gulich, señaló que "tenemos registradas 230.000 hectáreas quemadas. Se trata de la superficie más importante de los últimos 20 años". De todas maneras, remarcó que "el bosque nativo tiene una buena capacidad de recuperación" pese a la actual situación.