Tras las nuevas medidas decretadas por el gobernador Omar Perotti para frenar la curva de contagios y hospitalizaciones por coronavirus, la provincia y la municipalidad comenzaron a realizar operativos de control. Durante el móvil de Nacional Rosario, el subsecretario de Prevención y Control Urbano de Santa Fe, Alberto Mongia, informó que quien esté circulando en su vehículo se le exige, en primera instancia, "la documentación necesaria, llamémosle las aplicaciones electrónicas, o la justificación del por qué está circulando". Además, señaló que las personas que realicen actividades consideradas esenciales, éstas deben ser "genuinas", es decir, "que vaya y cumpla con la actividad esencial que dice su autorización". "Tenemos que llevar los conceptos a las práctica, que es lo más difícil", agregó, y finalizó advirtiendo que las sanciones por incumplimientos son de tinte judicial.

Por su parte, la secretaria de Control y Convivencia municipal, Carolina Labayru, expresó: "Las restricciones van a ser controladas no solamente vehicularmente, sino que también están orientadas a los comercios, al horario de cumplimiento según sean esenciales o no esenciales". En tanto, aseveró que "el año pasado, en el momento de mayor confinamiento, al corralón se remitieron unos 600 autos y motos. Quedan todavía en el corralón 300 porque los fiscales no han dado la autorización para que las personas a las cuales se le secuestró el vehículo puedan retirarlo. Es una causa judicial, no es que se paga una multa y se saca el vehículo".