En comunicación con Radio Nacional, en el programa “Aire de Casa”, el Dr. Marcos Ledesma, miembro de la Pyme argentina Ecleris, que desarrolló una escafandra de ventilación no invasiva para pacientes enfermos de Covid-19, brindó información sobre su funcionamiento. 

En este sentido, el Dr. Ledesma, explicó: “Nosotros desarrollamos hace un año, una escafandra de plástico que permite suministrar oxígeno a alta presión y aprobada por Anmat. Cuando la enfermedad de Covid-19 se complica comienza la neumonía, eso hace que los pulmones empiecen a colapsar, a llenarse de líquido, y no permite que el paciente pueda respirar. Cuando la persona llega en esas condiciones al hospital, lo primero que se hace es colocar una bigotera de oxígeno, que muchas veces resuelve la manera de recuperar el oxígeno al paciente y cuando no, muchas veces esos paciente normalmente iban a la intubación en terapia intensiva. Esto que desarrollamos, es una instancia intermedia, que hace que muchos pacientes se salven de ir a la terapia, justamente porque el oxígeno se suministra con alta presión, infla los pulmones, y ayuda a respirar”, especificó.

Además, el Doctor contó que hay más de 9.000 pacientes tratados con este sistema en Argentina, y más de 2500 cascos instalados en distintos nosocomios de todo el país. En Santa Cruz hay 50 cascos instalados aproximadamente. La estadística de esta experiencia es muy alta, ya que 3 de cada 4 pacientes se salva de ser intubado en terapia intensiva. Teniendo en cuenta que la posibilidad de muerte en la terapia es alta. 

Los creadores del casco de ventilación fueron los ingenieros de la Pyme “Ecleris”, que en base a tecnologías existentes, como las escafandras que ya existían en el mercado y eran utilizadas para cámaras hiperbaticas, realizaron modificaciones para que fueran adaptadas a la enfermedad Covid-19, colocando filtros para que no contamine al personal que atiende al paciente, como así también, colocaron válvulas para regular la presión dentro del casco. 

La idea nace luego de que un integrante de la Pyme se contagiara y atravesara la enfermedad del coronavirus, “no tuvo opción, llegó a la terapia y estuvo tres semanas internado.  Es el día de hoy, pasado un año y tiene la mitad de sus pulmones estropeados”, agregó Ledesma. 

Los beneficios de utilizar el casco en los hospitales y centros médicos es la liberación a los agentes sanitarios, teniendo en cuenta que el personal de terapia, los médicos terapistas, enfermeros, kinesiólogos, están saturados. Tanto a esto, el doctor comentó: “es un recurso más para que los pacientes no lleguen ahí, y no colapsar a los médicos. Con estas escafandras, el paciente está despierto, lúcido, en contacto con sus familiares a vía telefónica”. Cabe destacar que la capacitación en el uso de esta tecnología dura entre 45’ a 1hs. 

Por otro lado, es importante saber que el casco no es de uso doméstico, ya que el paciente dentro de la escafandra respira una mezcla de oxígeno y aire que se saca de los poliductos que se encuentran detrás de las camas de los hospitales. Y se puede utilizar con un tubo de oxígeno, pero exclusivamente en caso de traslado en ambulancia. 

Para mayor información, los interesados se podrán contactar a través del sitio web www.ecleris.com