La muerte de Ana Ríos, la estudiante jujeña de Medicina Veterinaria, se puede enmarcar como un femicidio, según afirman los familiares y amigos de la víctima, quienes apuntan contra su novio, Facundo Guerrero. "Según los trascendidos de lo que él declaró, dio una versión totalmente falaz y tergiversó todo. Él -Guerrero- dijo que ella -Ana- estaba con un cuadro depresivio porque la habían corrido del trabajo, lo que quedó totalmente descartado por el empleador. Ella tenía proyectos a corto y largo plazo, por lo que nos hace presuponer que tenga pensado quitarse la vida. Era una persona activista y rescatista de animales. Esto se da en un marco de violencia de género. Son todas hipótesis, así que esamos esperando los resultados de las pericias que se están realizando. Hemos conseguido una cantidad frondosa de pruebas y testimoniales que dan prueba de la situación de violencia que ella padecía", comentó Juan Musi, abogado defensor de la familia de Ríos.