Laura Alonso, titular de la Oficina Anticorrupción (OA), visitó Radio Nacional y dialogó con María Laura Santillán sobre el funcionamiento del área, los conflictos de intereses de los funcionarios públicos que vienen del sector privado y el deseo de que el Congreso Nacional discuta una nueva Ley de Ética Pública."Los conflictos de intereses existen y se previenen en todas las partes del mundo a través de la ley", afirmó.

"Hoy hay situaciones previstas en la ley de ética pública, no de corrupción, porque existe un nuevo registro de trabajo. Muchos de los funcionarios vienen del nuevo gobierno. Una persona que viene a trabajar al Estado tiene que decir cuáles son sus intereses económicos, financieros o de otro tipo.", destacó Alonso.

"Los conflictos de intereses existen y se previenen en todas las partes del mundo a través de la ley", expresó.

Respecto al caso de Juan José Aranguren, ministro de Energía, que era uno de los accionistas de la empresa Shell afirmó que "es la primera vez que la OA obliga a través de una resolución que un ministro se desprenderse de acciones millonarias de una empresa privada.  Además se lo excuso, es decir, cada vez que él tuviera que decidir algo sobre la componía el que debe decidir es el ministro de producción".

"La Oficina Anticorrupción en 15 meses funcionó como nunca. mejor de lo que había funcionado en 15 años. La Argentina hoy apuesta a la transparencia", destacó Alonso y dijo que hoy "se trabaja en una agenda positiva. Se abandonó un estado de corrupción y resta terminar con la corrupción sistémica".

La OA no puede por ley controlar otros poderes del Estado que no sea el ejecutivo. Es muy grave la situación que pasa la Procuraduría General de la Nación. Esto afecta la imagen e intereses del País. Considero que Alejandra Gils Carbó debería renunciar". No hay control del poder judicial.