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La historia del fundador de Piriápolis y la del músico Miguel Abuelo

Francisco Píria, (1847-1933) no solo fue un empresario y alquimista uruguayo, también fue el creador de ciudad balnearia Piriápolis, en 1890.

Luego de la muerte de su padre cuando era tan solo un niño, se mudó a Italia donde su cuñado, un sacerdote jesuita, se encargaría de su educación. Para su adolescencia, ya estaba capacitado en humanidades y ciencias.

Con el tiempo regresó a su país natal, en el que tuvo diferentes oficios, destacándose especialmente como rematador. Esa habilidad, y una gran dotación de ahorros, le permitió comprar 2700 hectáreas, en donde construyó su hogar, el famoso Castillo de Piria (hoy un museo), el Gran Hotel Argentino, la rambla, un ferrocarril y distintos desarrollos inmobiliarios. En 1912, tomó la decisión de rematar sus tierras, y poco a poco se fue conformando la comunidad en el condado de Maldonado, conocido como Piriápolis.

Miguel Ángel Peralta, mejor conocido como Miguel Abuelo, fue un artista importante y parte de la primera oleada de músicos del rock argentino.

En sus comienzos, las peñas folklóricas eran su habitual entretenimiento junto con su hermana, con quien realizaban interpretaciones musicales a diario.

En 1967, formó los Abuelos de la Nada, nombre inspirado en una frase del libro de Leopoldo Marechal, El banquete de Severo Arcángelo, que decía: "Padre de los piojos, abuelo de la nada". Fue ahí, junto con Pipo Lernoud, que comenzaron a reclutar músicos para las primeras grabaciones.

La banda quedó conformada en sus comienzo por Pappo,  Héctor “Pomo” Lorenzo, Miky Lara, Alberto “Abuelo” Lara, y Eduardo “Mayoneso”.