A partir del incendio de interfase del Cerro Currumahuida en la localidad vecina de El Hoyo, se difundió en redes sociales el falso hallazgo de un folleto donde la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) se adjudica el fuego a modo de atentado.
Desde entonces, algunos medios locales se hicieron eco y difundieron el panfleto confirmando una hipótesis sin sostén judicial. Rápidamente el Grupo Clarín se encargó de potenciar el titular y más tarde, todo fue desmentido por la Brigada de Investigaciones de la Comarca Andina y el Ministerio de Seguridad del Chubut, quienes informaron que no existe una denuncia formal y que no aparecieron testigos oculares que indiquen la autoría intencional del siniestro.
Todos los usuarios de las redes sociales tenemos atención selectiva, esto significa que según nuestra identidad cultural y política, le prestamos más atención a los contenidos que son consistentes con nuestra cosmovisión y el hecho de compartir o publicar mensajes en nuestros perfiles personales nos convierte en replicadores y prosumidores de información que, a veces, es falsa.
Pero nuestra responsabilidad individual en medios digitales se ve limitada cuando una fake new se instala no solo a través de redes sociales, sino también por los grandes medios masivos de información, porque son estos los que terminan generando o validando una noticia mal intencionada.
Sobre esta situación hablamos con Miriam Lewin, Defensora del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual. Periodista de investigación reconocida a nivel internacional, docente, autora de seis libros y partícipe en la producción de diferentes documentales. Trabajó en América TV, Canal 13, TN, Radio Nacional y Radio el Mundo.
En diálogo con Radio Nacional El Bolsón, reflexionó sobre el tejido sociopolítico actual y propuso una serie de preguntas para cuestionar: ¿Para qué o para quiénes operan las noticias falsas? ¿Qué sentidos construyen?
Sobre este tema, también nos aportó Mauro Brissio, mágister y licenciado en Comunicación en la Universidad Nacional de la Matanza, especialista en fake news, docente e impuslor del proyecto de ley Anti-Fake News.
Brissio, por su parte, hizo hincapié en la diferencia fundamental entre una noticia falsa (que no necesariamente tiene una intencionalidad negativa o de generar daño) y una fake new, que sí tiene efectivamente la intención de generar daño para perjudicar o beneficiar a algo o alguien. Las fake news son operaciones políticas financiadas por grupos de poder que tienen una planificación y una estructura analítica, comunicacional y política.
El debate actual por este tema pone sobre la mesa la legislación de este problema y uno de los puntos más importantes: ¿Qué es y que no es la libertad de pensamiento y expresión?
Para registrar una denuncia podés ingresar a https://defensadelpublico.gob.ar/ o al 0800 999 3333.
Identificá si estás difundiendo una noticia falsa o fake new siguiendo estos pasos: Investigá la fuente de donde viene la noticia, verificá quién es el autor del artículo, leé la noticia completa antes de compartirla, no te quedes sólo con el título y la imagen, verificá la fecha de publicación, en algunos casos se viralizan noticias que son de hace algunos años, mirá bien la URL (dirección del sitio web) porque se pueden hacer pasar por sitios verdaderos que tienen un nombre parecido, realizá una búsqueda en Google para ver si la noticia está en otros medios de comunicación.