Evo Morales, presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, brindó una conferencia de prensa en la que hizo un “llamado a la comunidad internacional para defender la democracia” ya que afirmó que el paro general convocado en diferentes regiones del país es “un golpe de Estado” que también “se expresa en no dejar realizar el conteo y en la quema de instituciones”.

Tras jornadas con violentos choques entre opositores y oficialistas en Bolivia que se extendieron por la incertidumbre generada por la interrupción en la carga de los resultados provisionales de las elecciones presidenciales que muestran al actual mandatario y candidato a la reelección, Evo Morales, como ganador pero todavía no hay claridad si lograría evitar una segunda vuelta.

En ese contexto, Morales cuestionó a la derecha de ese país y le pidió “que no siembre el odio”. Además aseguró que “el golpe de estado estaba listo desde antes”.

A pesar de la incertidumbre, el Presidente sostuvo que “garantizamos el gran triunfo” e intentó dar calma a los bolivianos: “Hemos recuperado la democracia”.