La introducción de la otra cóncava en San Blas en la década del ochenta llevó a una rápida expansión de la misma, sin controles, llegando hasta la ría de Bahía Blanca e incluso desde el Balneario El Cóndor hasta San Antonio Oeste.
Leandro Huniken, biólogo que estudiará durante dos años la posibilidad o no de crecimiento de este tipo de ostra, explicó que los primeros registros se dieron en el año 2004 con muchos juveniles en la zona de piedras.
Sin embargo, anticipó que las condiciones ambientales de El Cóndor podrían no ser las mejores, pero si se adaptan puede ser un problema, ya que se constituyen en arrecifes.