La provincia llegó a un principio de acuerdo con el grupo de acreedores que representa al 58 por ciento de los tenedores de bonos en el exterior.
Una vez concretado el acuerdo, se retira la demanda en los tribunales de Nueva York.
Desde el gobierno entrerriano destacaron el alivio y la previsibilidad que representará para la administración esta medida junto con amortizar los plazos de pago y las tasas de interés.