La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, aseguró que el organismo a su cargo "subestimó" la situación “complicada” de Argentina al inicio del programa con el organismo multilateral de crédito y resaltó “la herencia muy dura” que recibió el presidente Mauricio Macri de la administración kirchnerista.

La economía argentina “mostró una situación increíblemente complicada”, donde “varios actores, entre los que me incluyo, subestimamos la situación” cuando se comenzó a negociar el programa de financiamiento para el país, dijo Lagarde en Washington, en una charla organizada por el American Enterprise Institute.

En su exposición la titular del FMI, destacó que a pesar de las dificultades ahora tiene “esperanzas” sobre el futuro de la economía argentina.

Si “la implementación del actual programa continua” habrá “una razonable esperanza positiva” de que mejore la economía, dijo la directora del FMI.

Lagarde destacó que hubo una “herencia muy dura” del gobierno anterior al de Mauricio Macri, que la inflación “fue mucho más resiliente de lo que habíamos pensado” y que controlarla “tomó mucho más tiempo de lo que habíamos anticipado”.

Sin embargo, la economía “ha mejorado y continuará mejorando” y con “la masa monetaria como ancla” como hasta ahora, el programa “va a ser exitoso para los argentinos y la economía argentina”, aseguró.

Lagarde destacó que ve a Macri “muy comprometido con el programa” de alcanzar el equilibrio fiscal este año, a cambio de obtener créditos por US$ 57.000 millones para pagar las obligaciones financieras contraídas hasta el 2020.

También aseguró que “no estamos para apoyar, anticipar o temer cualquier cambio político”, en referencia a las próximas elecciones presidenciales, “estamos aquí para ayudar a la economía y a la gente. Esos son los principios rectores que tenemos. Depende de la gente de cualquier país decidir su futuro”.