Este lunes la Aduana local hizo entrega de una donación de “rezago” al Gobierno Provincial, consistente en productos electrónicos incautados que son destinados a un determinado fin social. Los elementos entregados fueron parte de un contrabando desde Chile en 2014 que nadie quiso investigar, informándose incluso ante una denuncia que los mismos ya habían sido donados con destino incierto. Los elementos estuvieron estos tres años en el depósito de la Aduana Río Grande, y nadie de la Justicia Federal quiso profundizar la investigación.
Los elementos consistieron en heladeras, televisores y notebook que el 29 de marzo de 2014 fueron hallados abandonados en la ruta, en proximidades a la frontera de San Sebastián, donde esa noche se montó un operativo sorpresa a sabiendas de una maniobra de contrabando en la que se sospechaban participaban operadores privados y aduaneros.
En el momento de realizarse la donación de esos mismos elementos “ya donados”, el abogado de la Aduana, el Dr. Armando Mirabelli en diálogo con Radio Nacional fue contundente, “estos elementos siempre permanecieron acá en el depósito de la Aduana, en custodia de la Aduana”.
Televisores de alta gama, heladeras de alto valor y notebook con sus números de serie, embalajes y elementos que podrían haber servido a una investigación seria que siguiera la trazabilidad de su comercialización, a fin de llegar a los responsables de la compra e intento de contrabando.
Los elementos estuvieron tres años en un depósito aduanero sin nadie con la intención seria de investigar.