La pelea entre el Gobierno de la Nación y el de Tucumán parece estar en su momento de ebullición. Es que el secretario de Vivienda y Hábitat de la Nación, Domingo Amaya, acusó a la administración manzurista de no tener planificación para concretar obras, al tiempo que aseguró que los fondos que reclaman los funcionarios locales sí se giraron. “Una obra que se tuvo que haber licitado en marzo la pospusieron a mayo. No tenemos la información de 1000 casas, más otras 1000 casas que les di (sic) para realizar en Famaillá. Lamentablemente Tucumán es una improvisación constante, no tiene un banco de proyectos, no tienen leyes de generación de suelo urbano, no tiene plan estratégico de desarrollo de crecimiento urbanístico. Los caminos de la producción están destruidos. Tucumán improvisa permanentemente. También el gobierno anterior”, acusó Amaya.