La Cámara de Diputados resolvió ayer por mayoría “desechar” el proyecto de presupuesto 2020 enviado por el Poder Ejecutivo provincial. Los legisladores de la cámara baja se basaron en el artículo 139 de la Constitución provincial, y así propusieron que el presupuesto sea “desechado”. La moción fue aprobada por 22 votos a 18.
La moción para que sea rechazado, fue propuesta por el diputado del bloque Juntos por la Gente, Juan Pablo Funes Bianchi, lo que generó un acalorado debate que duró cerca de 3 horas, donde los diputados afines al gobernador Alberto Rodríguez Saá, argumentaron que el artículo en cuestión establece que para ser desechado, tiene que ser tratado por “la Legislatura”, lo que implica la Cámara de Diputados y también la de Senadores. Como el proyecto todavía no pasó por la Senadores, los albertistas consideraron que no era posible desecharlo.
Funes Bianchi sostuvo que habían dos despachos sobre el presupuesto pero uno "era exactamente igual que el enviado por el Gobierno provincial y el otro lo cambiaba (al presupuesto) en exceso", es por eso que se propuso la "posibilidad intermedia" que implicó desechar el presupuesto.
Por el lado de la oposición, la interpretación que se hizo es que el proyecto sí puede ser desechado solo por la Cámara de Diputados, que además es la cámara por la que ingresó; por lo que el Gobierno deberá enviar uno nuevo.
Por otro lado el artículo 139 establece además que cada Cámara tendrá un plazo de 20 días para tratar el nuevo proyecto. Si es que el Gobierno envía uno nuevo, porque los oficialistas consideran que el proyecto ha sido rechazado.
Luis Martínez, presidente del bloque Unidad Justicialista, manifestó que la decisión tomada por la mayoría de los legisladores "deja a los puntanos sin presupuesto" y que "el poder Ejecutivo se queda sin herramientas gestión".
En cuanto al contenido del presupuesto en si mismo, lo que más se debatió son los recursos de coparticipación a los municipios, donde la provincia ha marcado en el presupuesto que el año que viene va a recibir 40.000 millones de recursos federales, cuando en realidad esa cifra asciende a 49.000 millones.
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