Desde el año 2013, el 2 de mayo se denomina el Día Mundial contra el Bullying con el objetivo de concientizar a la sociedad sobre los riesgos del acoso escolar. Cuando se habla de bullying, se hace referencia a la forma que un individuo se dirige a otra persona, de forma verbal o física, causando un daño temporal o permanente en la víctima.
Debora Schoj, responsable provincial del Programa para el Abordaje de Situaciones Educativas Complejas, expresó: “Hay que poner a circular esta temática en toda la comunidad porque es una problemática social, que no solamente pasa por las escuelas”, agregó “es importante que en este día en particular, los adultos podamos pensar cual es nuestro aporte para visibilizar y alojar estas situaciones, encontrar los espacios para poder conversar con nuestros niños y adolescentes y poder escucharlos” finalizó.