La biotecnóloga y científica del Conicet, Mercedes Pastorini, explicó características de la vacuna rusa Sputnik V, tras la compra de 25 millones de dosis según anunció el presidente Alberto Fernández.
Explicó que esta vacuna logró en agosto la aprobación burocrática. “Está basada en adenovirus que se utilizan como vehículo para ingresar material genético adentro de las células. Los adenovirus son virus que generan algún tipo de infección en los humanos pero en este caso están modificados para no provocar ningún tipo de infección. Está hecho a propósito para generar una respuesta inmune adentro de la célula”.
Destacó que se aguarda la aprobación biológica a cargo de una institución de referencia. “Por lo tanto, esto está sujeto a los resultados que se vean de la fase 3 que se está llevando a cabo a nivel mundial.”
La fase 3 tiene por objetivo vacunar a 40.000 personas que incluye a un grupo placebo. En esta fase lo más importante que se evalúa es que sea segura y que proteja a la gente de la enfermedad. “Es decir, que esas personas recorran, hagan su vida y que no se contagien naturalmente con el virus”, resumió.
La científica aclaró que se anunció la compra de 25 millones de dosis para Argentina pero la aplicación va a depender de los resultados de la fase 3. Para poder inocular a la población hace falta la aprobación del Anmat. “La idea es negociar con todas las empresas que están desarrollando vacunas para asegurarse la mayor cantidad de dosis posibles. Es una parte estratégica, para garantizar la cantidad necesaria en cuanto se apruebe la fase 3”.
Pastorini recordó que las personas que primero la recibirán serán quienes están más expuestos y los pacientes de riesgo.
“Las vacunas se analizan para que no generen daño y sean seguras. Si los perjuicios son mayores que los beneficios no va a estar en el mercado. Tenemos que estar tranquilos aunque el proceso esté más acelerado. Es así porque hay muchísima inversión y hay más voluntarios ya que todo el mundo quiere que exista una vacuna”, concluyó la biotecnóloga.