Paola dio su estremecedor testimonio en Temprano es Mejor . Contó que desde mediados de abril comenzó junto a su esposo a manifestar los síntomas, situación que se vio agravada debido a una bronquitis. Según comentó, desde Osep se negaban a atenderlos porque "no saturaban" lo suficiente.

"Mi esposo se agravó, ya sabíamos que teníamos COVID-19, y todos los días íbamos a la guardia con muchísima fiebre, nos decían que nos fuéramos porque íbamos a contagiar a otras personas", contó.

Hacia el 21 de abril el estado de salud del marido de la docente se agrava hasta rozar una peritonitis por lo que se vieron obligados a internarlo bajo "graves irrugularidades médicas".

La familia es de Los Corralitos y tiene tres niñas. Los padres de la docente tuvieron que exponerse en este contexto para hacerse cargo del cuidado de Paola y sus nietas mientras médicos y funcionarios de OSEP se desentendieron de su cuadro. "Hasta el momento no me han llamado para preguntarme si estoy viva", expresó.