Jennifer Carrera, periodista ecuatoriana desde Quito relató en comunicación con Nacional Informa – Edición Verano, que “el escenario cambió en cuestión de horas desde el lunes 8 de enero”, momento en el que se declaró el estado de excepción interna y toque de queda tras la fuga del líder de la banda narco “los choneros”, Fito Macías.
La toma de rehenes en TC Televisión propició rápidamente la declaración del “Estado de guerra” por parte del gobierno de Noboa, “esto es para que las fuerzas armadas puedan actuar tomar medidas a este nivel”, detalló Carrera y continuó: “esto generó una crisis a nivel nacional, tuvieron que cerrarse comercios y escuelas, también hubo problemas en el tráfico porque la gente se volcó a las calles para volver inmediatamente a sus casas y se retomó trabajo virtual para las dependencias públicas.”
De acuerdo a lo relatado por la periodista unas veintitrés ciudades del país habrían sido atacadas por pandillas de delincuentes y en algunas cárceles de Ecuador se asesinaron a guardias de seguridad. Esto también propició que la presidencia declarara a unas veintidós organizaciones como “terroristas” y que pasaran a ser objetivos militares: “ya se volcó toda la fuerza militar para capturarlos y, con el estado de guerra declarado, asesinarlos en caso de que sea necesario obviando el uso progresivo de la fuerza”, enfatizó.
El Alcalde de Quito, Pabel Muñoz, tomó también medidas de resguardo a la población como la suspensión de clases en las escuelas y la custodia de las líneas de metro y transporte público. “Hay una zozobra muy grande por parte de la población por conocer que es lo que pasará más adelante, es la primera vez que vivimos algo como esto en las últimas décadas, hay mucho miedo”, concluyó Carrera.