LIVING DEPORTIVO NEUQUÉN

Carlos Héctor "Tuerkita" Valenzuela: Lo lúdico como medio de vida

En las charlas íntimas de Tampoco es para tanto, Carlos Héctor Valenzuela, mas conocido como Tuerkita Valenzuela, participó de las Charlas de Living, con el juego como bandera. Nacido en Cutral Có, llegó a San Martín de los Andes de la mano de la docencia y las colonias de verano. De un día para el otro, se quedó a aportar su mirada para que el deporte sea esa herramienta social que permita que quien quiera, pueda, se sienta parte, viva mejor y con una sonrisa. Lo lúdico como medio de vida, hasta crear juegos alternativos como el Trotrol, no convencionales, hasta que se juegue en escuelas del país y de Paraguay, como juego registrado para la educación.

“La vocación por la docencia estaba, pero a ser docente se aprende. De padre Albañil, de madre Empleada Doméstica, cuando era adolescente entendí que quería dedicarme a esto y conté con el apoyo de mi familia. Vivía cerca del Instituto de Formación Docente de Cutral Có y allí comencé, a sabiendas que mis viejos no podían bancarme económicamente para ir a hacer el profesorado de Educación Física”, narra Tuerkita, quien hizo su camino a fuerza de conciencia en su búsqueda, e ir dando cada paso disfrutando el momento.

La creación de los juegos, y el modo de la docencia tiene su raíz, en la vida de Valenzuela, en el Teatro Callejero, en las artes de payaso, en la murga porteña y su vocación por no ser elitista como otras disciplinas carnavaleras, en la inclusión del bombo con platillo: “surge del arte circense, lo lúdico, por la infancia que tuve en mi pueblo, de estar en la calle jugando todo el tiempo. No volvería a mi infancia, la tengo presente todos los días en mis recuerdos vivos. Me encanta mi trabajo, voy con una sonrisa”, describe apasionado.

“Hay una mirada de las nuevas colonias, donde los chicos y chicas aprovechan el verano para practicar juegos que no tienen durante el año. Con otra mirada, el chico no sabía que iba a jugar a algo convencional y hegemónico. Lo que importa en los juegos en uno crea, adapta, impulsa es que lo pueda jugar cualquiera, que nadie quede afuera. Lo llevo al agua, se desarrollan de igual modo al aire libre, o en lugares cerrados. Y aprender a jugar, a ganar y a perder. Querer ganar es humano, también de los animales que compiten naturalmente. Si no me toca ganar, algo tengo que haber aprendido, y nunca olvidar que es un placer aprender en libertad, donde nada esté impuesto, donde se aprenda jugando”, resalta Tuerkita.