A comienzo de los años dos mil, un grupo de concejales de San Rafael viajó a Trenque Lauquen, Provincia de Buenos Aires, para interiorizarse sobre el reciclado de basura.
A la par, la inquietud periodística consiguió el envió de imanes calcomanía donde se puede leer a modo de título: “Trenque Lauquen es tuya. Cuidala”. Más abajo, en el centro, hay una caricatura de un recolector que tiene una bolsa en cada mano; la verde dice: “De lunes a sábados, Orgánicos (restos de comidas, pelas de frutas y verduras, yerbas, hojas de jardín)”. La naranja expresa: “Miércoles y domingos, Inorgánicos (Papel y cartón, vidrios, latas, plásticos, pañales descartables, envases en general). En la parte inferior está la inscripción Prolim (Pro limpieza) y el logo de la Municipalidad de Trenque Lauquen.
Ejemplo más cercano: en General Alvear (La Marzolina), hace más de cinco años la comuna clasifica de modo similar 54 toneladas diarias de basura. Además de la reducción de residuos, se recuperan para reciclar, metales, vidrios, papel, PVC, hojalata y otros, mientras que los restos de comida, cáscaras, frutas, pastos, hojas y demás generan el Gas de los Pantanos (Biogás) a partir del cual se hace abono orgánico. Inorgánicos y Orgánicos se venden y la mitad de lo recaudado va para la cooperativa creada por la municipalidad alvearense para la gestión.
En San Rafael, en 2007 se trasladó la Planta de Residuos de Los Jilgueros (Cuadro Benegas) a La Tombina (El Cerrito). En la inauguración, se aseguró: “Con éste Parque de Saneamiento, terminamos definitivamente con el problema de los residuos en San Rafael. Instalaremos una planta para hacer un tratamiento más moderno. Ya hay propuestas del sector privado, sin costo para el municipio, que estamos considerando. La empresa se encargaría del reciclado y tratamiento de residuos. La idea es que esto sea un parque donde quien lo visite no vea basura y todo se recicle. Se fueron diez años sin más noticias.
En el mundo, cuando alimentos, productos de consumo y uso diario se convierten en desechos, intervienen los gobiernos locales quienes toman la responsabilidad de ser propietarios de esos desechos encargándose de recolección, transporte, tratamiento y reciclaje para transformarlos en nuevas materias primas que ocuparan un importante rol en el circuito económico doméstico.
Aquí no hubo inversión privada y, salvo para recolectar y transportar, no intervino la comuna; solo se amontona basura que sin dudas provocará colapso.
Aunque La Tombina esté a 14 Km de la ciudad y los ojos no vean, crece la contaminación que produce Metano y Dióxido de Carbono y a todos los sanrafaelinos (distancia, al margen) afecta el Efecto Invernadero.
Por Roberto A. Bravo
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