Rafael Luis Freites, sacerdote de la parroquia comentó los detalles del incendio que se generó ayer y que afectó fundamentalmente el techo de un sector en construcción.

“Ayer alrededor de las 11 de la mañana se nos cortó la luz en el lugar y los primeros que descubrieron que había fuego en el salón grande de la parroquia, terminado de construir hace relativamente poco, fueron los albañiles que están trabajando en la sacristía del templo. Ellos advirtieron que había fuego y humo en el salón, que estaba cerrado”.

“El albañil, en un gesto bastante heroico rompió un vidrio e ingresó -relató el sacerdote. Advirtió que había una garrafa, que se había prendido fuego. La sacó con un gancho hacia afuera, el salón estaba lleno de un humo denso. Se prendió fuego toda la lana de vidrio que está debajo de las chapas del techo. Gracias a Dios los bomberos llegaron bastante rápido y apagaron todo”.

“Pudo haber sido mucho peor, aparentemente la estructura en general se ha salvado, se han quemado algunas ventanas, puertas y sillas. No sabemos si ha sido un cortocircuito lo que haya originado el incendio y después se haya encendido la garrafa o bien hasta podría haber sido intencional”.