La suba en el valor de los alimentos y la decisión del gobierno nacional de activar medidas para retrotraer precios al 1 de octubre a través de una mesa de diálogo obtuvo respaldo de parte de las organizaciones de consumidores y optimismo en el sector supermercadista.
"Me parece que congelar precios es una buena medida. Tenemos que bregar que los acuerdos se cumplan y las empresas no encuentren los vericuetos para no hacerlo", señaló Héctor Polino, representante de la asociación Consumidores Libres.
"Por supuesto que el consumidor, cuando va al supermercado y encuentra irregularidades, puede hacer la denuncia. Pero el rol de control es de los Estados, que tienen que actuar coordinadamente a nivel nacional, provincial y municipal", especificó.
En ese marco, aseveró que “tenemos que poner en funcionamiento las normas legales vigentes”. “Hay herramientas legales para combatir la especulación y el abuso respecto a la suba de precios. Para ser un país normal, no hay otra que cumplir la ley", sostuvo en diálogo con Radio Nacional.
Por su parte, Víctor Palpacelli, de la Federación de Autoservicios y Supermercados de Argentina (Fasa), explicó que “nosotros somos el último eslabón de la cadena y los que nos enfrentamos a los clientes”. “Recibimos una lista de precios y no tenemos muchas opciones. El escenario inflacionario de la Argentina es un escenario ideal para la disparada de precios", expresó.
"Hay que ser optimistas. Se ha abierto una mesa de diálogo con todos los actores de la cadena y creo que tenemos que encontrar los consensos para evitar las nuevas disparadas en los costos de producción y los precios", finalizó.
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