El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva destacó la "decencia" y el "coraje" del presidente argentino, por haberlo visitado en plena campaña electoral en su celda de la ciudad de Curitiba, en el sur de Brasil.
Lula también agradeció al Papa Francisco por el respaldo durante los 580 días que pasó en la prisión, durante una conferencia de prensa.
Afirmó también que fue víctima de la mayor mentira de la justicia en 500 años de historia en su país, en la primera reacción ante la anulación de sus condenas y procesos, lo cual lo libera para poder participar de las elecciones presidenciales en 2022.